Millennials, centennials y su oportunidad para trascender en tiempos de crisis.
Con información de: Leadership in a crisis: Responding to the coronavirus outbrake and future challenges. Por: Gemma D’Auria y Aaron de Smet. McKinsey & Company, 2020. Reflexión: Kamaleo®, contribución Melissa Llerandi.
Vivimos un momento único en la historia, en el que los datos son desbordantes pero no informan, sino confunden. Las opiniones son polarizadas y algunas veces pareciera que se busca ganar argumentos a partir de la lógica en vez de protegernos de este inusual virus.
Sin embargo, en medio de todo esto tenemos el privilegio de ser testigos de cosas únicas y puramente humanas que se nos presentan todos los días aún en el confinamiento: vecinos que aplauden de forma coordinada al personal de la salud, quienes rompen el silencio en amistades en pausa para cuidar emocionalmente de alguien que vive al otro lado del mundo, humanos valientes que por primera vez se ponen delante de una cámara para compartir masivamente su talento a través de plataformas online y emprendedores que dan un necesario voto de confianza a sus colaboradores para que trabajen desde casa, recalibrando su definición de productividad.
Y es así como en medio de la contingencia los jóvenes pueden ubicar la oportunidad de brillar, ayudando a comprender a las generaciones más grandes que todos los clichés que los rodean tienen un potencial que hasta ahora estaba oculto, pero ahora está listo para ser utilizado si los líderes de las empresas prestan suficiente atención.
D’Auria y De Smet (2020), señalan que ante lo que estamos viviendo el primer paso para quienes dirigen las organizaciones es reconocer la crisis, abrazando la falta de certeza y familiaridad que conlleva. La situación a la que nos enfrentamos es muy distinta a los retos organizacionales normales, por lo que el tiempo de respuesta de los altos ejecutivos no es lo suficientemente rápido, surgiendo la necesidad de confiar en los equipos de trabajo, formados en su mayoría por jóvenes.
Como líder, estas son algunas de las cosas que podrías considerar útiles en el trato con millennials y centennials:
- Formar equipos de trabajo enfocados en la solución de problemas específicos: A los que son parte de estas cohortes demográficas les encanta saber el impacto que tienen en el resultado de la organización, y estarán felices de impactar positivamente durante tiempos difíciles.
- Identificar las implicaciones que esta crisis está teniendo en la rutina diaria de tu negocio y hacer ajustes que ayuden a los empleados a adaptarse a las nuevas normas: Confía en que los jóvenes tienen un arsenal de aplicaciones, plataformas y tips tecnológicos que te ayudarán a descubrir, sorteando los retos a la estructura organizacional
- Poner especial atención en aquellos colaboradores que son adaptables, flexibles y transparentes.
- Promover la seguridad psicológica, permitiendo una abierta discusión de ideas y miedos: Ten presente que los millennials y centennials son generaciones que requieren de retroalimentación y contención. Procura dar el espacio para la expresión y lluvia de ideas.
En este momento los jóvenes tienen ante sí la posibilidad de romper paradigmas, de recrear la manera en que se les caracteriza y contener a los mayores, justo ahora en que el mundo laboral se desarrollará en un gran porcentaje de forma virtual: en su mundo; mismo que dominan, que les hace sentir cómodos y que de ser bien aprovechado cambiará para siempre la forma en que se mide su productividad.
¿Qué propuestas han tenido los colaboradores jóvenes de tu organización? Si eres millennial o centennial, ¿cómo puedes apoyar a la empresa con tu conocimiento tecnológico? Nos encantaría saber estas respuestas, así como comentarios e ideas que resonaran a partir de la lectura de esta contribución.
Si deseas conocer la bibliografía consultada así como más información referente al tema, escríbenos a info@kamaleo.net
Crédito Fotos:
www.shutterstock.com
Juan Carmona
1 Abr 2020Es cierto que estamos viviendo en tiempos de oportunidad. De entrada, estos eventos nos invitan a pausar, pero en muchos casos pueden llegar a significar un reinicio o un replanteamiento de cómo se venían haciendo las cosas. En este reacomodo, estoy convencido que la tecnología y los jóvenes (incluso los niños) jugarán un papel fundamental en el nuevo orden.
En las empresas hay que abrir más espacios para escuchar y entender a las nuevas generaciones. Y los profesionales, tal vez deberíamos reconectarnos con nuestra propia curiosidad, el espíritu de explorador y la avidez de aprender…
Excelente aportación, gracias!